Fantástico día. A los asistentes nada les voy a descubrir, sólo es para ponerles los dientes largos a los no estuvieron.
Tere nos deleitó con una exquisita sopa de tomate con to los avíos, tres lebrillos a tente ponete que cayeron impepinablemante.
De cerveza y vino los hicimos bien, nos acabamos bebiendo hasta el Don Simón que tenía Rosina en el puerto para los guisos.
También dimos buena cuenta una paletilla que fue el run run de todo el día, plato va plato viene. Mención especial para el queso, varios y muy buenos, pero uno que se encontró Natalio en su lacena, que había sobrao de una reunión de hace dos años estaba que quitaba el sentio.
Ya media tarde, café, tarta(s) y puro. Toma ya. Un eminente Kinki cumplía medio siglo y fue homenajeado como se merecía. De sus ojos resbaló alguna lágrimilla cuando el expresidente saliente le dedicó unas bonitas palabras. La presidenta, por motivos personales no podía articular palabra.
Para rematar la tarde, hicimos chin-chin para celebrar el día con vaso largo, on the rock, condimentos alcohólicos varios y algún chorrito de refresco (sólo si cabía).
Tuvimos la grata compañía de dos holandeses, si habéis leído bien. Chus y Ángel que recogen todo lo que se encuentran tirao. “El hombre de Holanda, el Hombre que Anda”. Uno que estaba aburrido y dijo “me voy pa Egipto”, y se puso a andar y p’allá va. Llegar, llegará, lo que no sabemos es cuando. Fijaos que desde Holanda pa Egipto ha pasado por el Puerto, y va pa Córdoba …, eso sí, siempre andando.
El Dioni dice que no, que éste hizo la mili con él y que es de Trasierra. Que se había enterado de lo de las sopas de tomate y que se ha marcao el rollo de que es holandés para ponerse como el quico. “Muy buenas estas soupas de toumate” “Esta patada de cerdo is very, very good “ “Muy bueno invento esto del coubata”, se le entendía de cuando en cuando.
Desde aquí solicito que se suba al blog el reportaje “interno” que hizo Dioni de la holandesa.
Un gran día, si señor.
Pues para terminar de poner los dientes largos al personal, os cuento como finalizó la cosa.
ResponderEliminarTras un percance eléctrico que, dada la situación personal de los técnicos, no pudo ser resuelto con éxito, y teniendo en cuenta lo avanzado de la hora y la falta de iluminación y las pocas luces del personal, se decidió trasladar la reunión a Rubio. De cenar no se acordó nadie.
Ya en nuestra sede habitual, apareció un individuo con acento raro, que a la postre resultó ser puertoriqueño, preguntando cómo llegar a Alanís. Dioni, muy observador como siempre, percibió que la vestimenta del susodicho era un tanto extraña, y decidió preguntarle por su ocupación: - Oye, tú, ¿eres mago o algo así?. El interpelado afirmó su condición de mago y dijo que venía de la feria de Zafra. Dioni le explicó que estábamos celebrando el cumpleaños de Javi y que si nos hacía unos trucos le pagaba un cubata.
A partir de ahí, el resto de la noche fue un festival de magia: barajas que desaparecían a la vista de todos los presentes, otras que se convertían en seises de corazones, cubiletes macizos, sesudamente examinados por el personal, a través de los que pasaban las cosas. La mesa de actuación fue uno de los barriles, lleno hasta las orejas de cubatas. El mago estaba absolutamente rodeado de gente, y es de destacar que Francisco Calderón le echaba directamente la respiración en el cogote. Y no fue el único.
El resto que lo termine de contar otro, pues yo ya no recuerdo mucho más.
A mi también se ma han saltao las lagrimas pero por el jarton de to lo que os metisteis pa er cuerpo.
ResponderEliminarFelicidades al chavalito de los 50 y salud para que disfrutemos de, por lo menos, otros 500 años más.